Antes de comenzar con una estrategia de Posicionamiento SEO para nuestro negocio,
debemos fijar unos objetivos claros y realistas. Así podremos llevar a cabo todos los pasos de una manera coherente y con un cierto criterio.
Para fijar los objetivos solemos seguir la estrategia SMART:
Specific -> Específicos
Measurables -> Medibles
Affordable -> Asequibles
Relevant -> Relevantes
Timely -> Enmarcados en el tiempo
ESPECÍFICOS
Cuando hablamos de metas
específicas, tratamos de alcanzar
objetivos muy definidos y muy
concretos
Por ejemplo, supongamos que desea recibir clientes
potenciales o visitas a su negocio. Y por lo tanto, poder implementar
una estrategia adecuada para lograr la meta marcada.
MEDIBLES
Los objetivos fijados
deben ser medibles. Con número detallado y que nos permita
dirigirnos a dónde tenemos que ir en un momento dado, con un
horizonte temporal.
Una herramienta altamente confiable para medir
resultados, y además gratis, es Google Analytics. Además, como
queremos posicionarnos
bien, debemos hacer feliz al dios Google.
ASEQUIBLES
Se debe tener en cuenta la
trayectoria de la empresa y del proyecto online. Es decir, los
objetivos planteados deben ser alcanzables; si nos encontramos con
una web con 1.500 visitas por mes, no sería una locura intentar
alcanzar 50 leads por mes, eso representaría un 3%, lo que no es un
disparate.
Pero no es razonable esperar una tasa de conversión
del 50%, ya que eso nos llevaría a la frustración.
RELEVANTES
El objetivo específico
debe coincidir con el propósito de la fundación de una empresa, es
decir, trabajar y ganar dinero.
Por lo tanto, establecer una meta
relevante puede ser aumentar el número de usuarios que utilizan un
código descuento, porque este código generará vender más y
aumentar la facturación, la captación de nuevos clientes y su
fidelización.
ENMARCADOS
EN EL TIEMPO
Al establecer metas, es muy
importante fijar los tiempos (timing) e intentar poder establecer la
estrategia correcta para que esto suceda.
También es importante
establecer dos tipos de metas y, evidentemente, monitorizar
seguimiento a corto y largo plazo, para, de esta manera, saber si
estamos organizando una estrategia bien estructurada o no, y sobre
todo, bien implementada con el fin de lograr los objetivos
establecidos.